Page 19 - Anuario 2023 | Colegio San Marcos de Macul
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La educación de los más pequeños en el San Marcos
María Eliana Rojas
Coordinadora Académica Ciclo I
La primera infancia, que abarca el ciclo inicial, se ha tenido que ir
adaptando en el trascurso de estos 70 años.
Sin lugar a dudas los niños de hoy presentan características diferentes a
los de años atrás, y esto se evidencia con mayor fuerza a partir de 1991
con la ratificación de los derechos del niño, en donde éstos pasan a ser
sujetos de derecho y pese a su corta edad se enfatiza la importancia de
darles a ellos un rol prioritario en su propio aprendizaje.
Atrás van quedando los niños que se entretenían con una caja de zapatos
amarrada con un cordel al extremo, que jugaban con tierra y hacían
sándwich con barro, donde había más vida de barrio que favorecía
relaciones interpersonales más abiertas, dinámicas, que favorecían a su
autonomía, existían más juegos en la plaza, picnic y paseos que visitas al
mall.
Hoy la imagen y el estímulo visual es protagonista, éstos son permanentes
e inmediatos y van dejando atrás los juguetes tradicionales y aquellos
objetos con los cuales podían construir tocar y hasta oler. Pero frente a
esta abismante diferencia vivida en el transcurso de estos años, debemos
dejar los juicios personales y enfrentarnos a cómo desarrollar una infancia
equilibrada.
En ello nuestro colegio ha sido congruente y consistente con su Proyecto
Educativo y descubrir, frente a todos estos cambios, donde está lo
esencial, qué huella queremos dejar en las mentes de estos pequeños .
Es así como en estos 70 años, independiente de los cambios que han
acontecido socialmente, seguimos sosteniendo con fuerza, convicción y
pasión, que los niños tienen magia. “Marquitos” para ellos ha sido, es y
seguirá siendo su compañero, aquel factor motivacional que los encanta,
que los motiva a aprender y a ser ese niño/a marquiano/a que se perfile en
estos conceptos que lo caracterizarán siendo un alumno, solidario,
evangelizador, organizado, seguro, tolerante, indagador, pensador e
íntegro.
Para ello ha sido clave, en el transcurso de este tiempo, promover un
ambiente de aprendizaje, que se caracterice por el afecto, relaciones
seguras, ofreciéndoles experiencias que le permitan formar las bases para
un óptimo desarrollo.
Lograr su independencia, le abrirá las posibilidades para conseguir una
libertad que le permita tomar, a futuro, sus propias decisiones.
Para poder cultivar estas mentes primero hay que llegar al corazón. De
eso Marquitos sabe mucho, los encanta, los anima, los ha acompañado en
estos 70 años, que esperamos sean muchos más…
¡Felicidades, Marquitos!